domingo, 9 de enero de 2011

Kasbah de Debdou

Ayer visité la Kasbah de Debdou. Me quedé impresionado con este lugar y el paisaje que lo rodea.

Desde Melilla hay una distancia de 180 kms. En poco más de dos horas, respetando los límites de velocidad establecidos y parando a tomar un té en el área de descanso de Taourirt, se llega hasta Debdou, un agradable viaje en el que podremos apreciar la belleza de estas tierras.

Debdou acogió a una importante comunidad hebrea desde el Siglo XIV hasta mediados del Siglo XX. Los primeros en llegar procedían de la Judería de Sevilla. En el siglo XV llegaron los que fueron injustamente expulsados de España por los Reyes Católicos.

Sobre el nombre de Debdou hay tres versiones: La primera está relacionada con la llegada de los Judios en el siglo XIV, incluyendo un llamado David Dou (que en realidad es el rabino David HaKohen), la segunda más probable, es la que se refiere a la palabra Amazigh que significa "embudo" y la tercera se refiere a la ocupación de estas tierras por los meriníes con el mismo significado "embudo".

La Kasbah data de los tiempos de los meriníes. Los Benimerines, Mariníes, Meriníes o Merínidas (1258-1465) es el nombre castellanizado que reciben los Banu Marin, miembros de la dinastía berebernorteafricana más importante que surgió tras la caída y destrucción del Imperio Almohade y gobernó buena parte del Magreb a partir de 1268.

En 1911 fue ocupada por los franceses que instalaron una guarnición militar. Entre 1936 y 1970 la población judía emigró a Israel y algunos a Melilla.

Su estado de conservación es lamentable, a pesar de estar declarada Patrimonio Mundial por la Unesco, lo que no impide que sea de extraordinaria belleza y encanto.





 



 

 










 









No hay comentarios:

Publicar un comentario